viernes, 15 de mayo de 2009

Apuntes sobre la crisis y posibles soluciones

En los últimos días, han aparecido en los medios de comunicación y persuasión, formadores de opinión nos quieren dar a entender que la salida a la crisis pasa por una moderación salarial, el retorno de los inmigrantes a sus países de origen e incluso una rebaja del sueldo de los funcionarios y demás trabajadores. Los medios lo hacen con sutileza; van diseminando ese mensaje como para crear un poso, un trasfondo que, convenienteme madurado y manipulado nos hará creer que optar por la rebaja de salarios es la única solución a la crisis.

Todavía no está el tema listo para que se diga abiertamente y estos opinadores pagados por grandes consorcios empresariales lo dicen con la boca pequeña, a sabiendas de que no es el momento de la recolección; se limitan a abonar el terreno y a sembrar cizaña entre los trabajadores. Uno de los métodos recurrentes es utilizar los supuestos privilegios de los funcionarios -que su trabajo les ha costado obtener- para dividir a la clase trabajadora, haciendo hincapié en que los empleados del Estado gozan de unas ventajas de las que el resto carecen.

Por otro lado, el gobierno "socialista" fomenta demagógicamente la xenofobia fácil cuando se plantea retornar a trabajadores rumanos con la excusa de rebajar las cifras del paro. Buscan falsos culpables y alientan la envidia entre perjudicados para que desviemos la atención de los verdaderos culpables: los banqueros, los tiburones financieros, los gobiernos cómplices y sus recetas neoliberales, el Banco Mundial, el FMI, la OMC, los lacayos de los sindicatos cómplices, y el propio sistema capitalista, que es incapaz de mover un dedo por los hambrientos, pero acude presto al rescate de alimañas banqueras corruptas a la par que genera desigualdades sociales insostenibles.

¿Queda clara la táctica? Sembrar división entre la clase trabajadora, desviar la atención de los auténticos causantes de la crisis e ir alimentando la idea de que la salida está en la rebaja de salarios de los trabajadores y en el trabajo que "nos quitan" los extranjeros.

Los que padecemos la crisis y no la hemos causado, no tenemos por qué pagar su coste. Los responsables no son los funcionarios con trabajo fijo ni los inmigrantes que vienen a buscarse la vida; los trabajadores, de la nacionalidad y condición que seamos, somos víctimas de la crisis, somos los primeros en ser despedidos, somos los que en una era hipertecnológica sufrimos horarios de semiesclavitud, y sobre todo, somos prescindibles para la clase corporativa y para este sistema irracional en el que sólo cuenta la acumulación de capital y el ser humano ha sido descartado.

Estamos sufriendo la crisis causada por banqueros, grandes conglomerados financieros, gobiernos cómplices de las privatizaciones de los beneficios y socialización de las pérdidas, alentadores de la especulación sin freno en el seno de un sistema capitalista que permite y fomenta este tipo de cosas; un sistema humana, ética y ecologicamente insostenible.

¿Y qué dicen nuestros políticos? Desde la derecha más cavernícola, el infame que nos gobernó durante 8 años pide desde la FAES (think-tank neocon financiado con más de 2 millones de euros por el gobierno del Pusilánime de Moncloa) el despido libre, mayor liberalización de los mercados y privatizarlo todo. Para los cortos de memoria, éstas recetas son precisamente las que nos han llevado a la crisis sistémica actual. Han sido estas diarreas mentales ideadas por los economistas Hayek, Milton Friedman y los miembros de la Escuela de Chicago (para más señas, asesores de Pinochet, Margaret Thatcher, Ronald Reagan y gobernantes de esa catadura) las que nos han traído hasta aquí. Las declaraciones del asesor de Murdoch no tendrían más importancia si no las hiciera suyas el Partido Popular. Y lo peor es que puede ganar las elecciones al Parlamento Europeo. Recientemente, el PP Europeo rechazó una moción para aumentar el permiso de maternidad. Para los trabajadores que vayan a votar a esta derecha les recuerdo que el despido libre, disfrazado con el eufemismo "flexibilidad laboral", está en su programa.

Desde el centro-derecha (léase PSOE), el Pusilánime de Moncloa, vendedor de humo, mal aprendiz de pitoniso y prestidigitador del lenguaje, sigue las recetas neocon que sólo servirán para que los bancos cuadren sus cuentas de inmorales beneficios a la par que señala a los inmigrantes rumanos y los invita a marcharse a su país. Esta actitud claramente xenófoba nada tiene que ver con la "S" de "socialista" que todavía figura en el nombre del partido en el poder. La falta de propuestas e imaginación del ministro de trabajo y otros colegas de gobierno demuestra a las claras de qué pie cojean a la vez que dan la impresión de estar ahí por enchufe y no por valía. Esta lacra del amiguismo no sólo salpica al gobierno; Rajoy fue puesto a dedo por Aznar.

A favor del presidente Zapatero cabe decir que al menos no va a aprobar el despido libre que pide la CEOE y la caverna mediática. También se ha comprometido a garantizar el actual gasto social y eso, como demuestra estadística en mano el politólogo y economista Vicenç Navarro es garantía de mayor bienestar social. Pero ojo, si la táctica citada al principio surte efecto, llegará un momento en que aparentemente resultará inevitable la moderación salarial y el despido libre. En ese momento, Zapatero o quizá Rajoy, anunciarán medidas drásticas contra los trabajadores con gran entusiasmo por parte de los medios de comunicación que entonarán el "misión cumplida" y pasarán el cazo. Nos harán creer que es lo único que se puede hacer.

¿Qué piden los empresarios? Lo de siempre: despido libre, reducción de los salarios y más ayudas. Casualmente coinciden con las propuestas del PP. Son las propuestas del FMI y el BM antes de la crisis ... Sí, las mismas que han fracasado, las mismas que han causado la crisis, las mismas que han acrecentado a límites inmorales la diferencia entre ricos y pobres.

¿Qué hacen los sindicatos mayoritarios? Vivir de las subvenciones y aceptar el modelo neoliberal. No lo discuten de raíz. Lo único destacable es que han echado al derechista Fidalgo y por eso nos debemos felicitar. No se preocupen por él, cobrará los favores hechos tal y como hizo su chaquetero antecesor J. A. Gutiérrez, que después de traicionar a IU y derechizar el sindicato, pasó el cepillo por el PSOE y ahora ocupa un escaño como diputado nacional. ¿Qué quiero decir con esto? Que estos señores sólo se preocupan por sí mismos y no van a hacer nada; son cómplices por inacción; son traidores porque te hacen creer que están del lado del obrero, del currante y no es así. A ellos sólo les importan sus subvenciones, sus liberados y sus delegados sindicales, pero no discuten de raíz la explotación laboral, la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores ni el sistema capitalista en sí. Han sido incapaces de dar un puñetazo en la mesa y decir "¡hasta aquí hemos llegado!" porque es políticamente incorrecto. No cabe esperar nada de estos lacayos del sistema.

¿Y qué podemos hacer?

En primer lugar, señalar a los verdaderos culpables: bancos, financieros, gobiernos cómplices, paraísos fiscales y al propio sistema capitalista en sí. Ellos deben pagar la crisis pues ellos la han creado. ¿Cómo? Sencillo:
  • Poner en marcha la tasa Tobin sobre el flujo de capital y extenderla a cualquier transacción monetaria. Se dificultaría así la especulación financiera. Para esto hace falta coraje y no parece que el Pusilánime de Moncloa vaya a hacer nada.
  • Expropiar a los bancos que operen en paraísos fiscales. De los españoles, no se salvaría ninguno de los grandes; de los extranjeros tampoco.
  • Nacionalizar los bancos y cajas con dificultades, pero hacerlo de verdad. El dinero público llegaría fácilmente a todos los que lo necesitasen y se "engrasaría" la economía. Los bancos privados están reteniendo el dinero público y saneando sus cuentas.
  • Aumentar en un 10% como mínimo los impuestos de las rentas más altas. A un señor que gana 1 millón de euros anuales no le van a sacar de rico 100.000 euros menos que no necesita. Hay que decir que este gobierno "socialista" rebajó los impuestos de los más ricos del 45% al 35%. Yo, que tuve una beca de 600 € brutos mensuales (durante 11 meses) y un sueldo durante 7 meses de 450 € prorrateados, por tener dos pagadores tuve que pagarle a Hacienda más de 60 € ... ¡Y vivía de alquiler! En cambio, a uno de los imputados de la trama Gürtel le han devuelto 1.000 € y conducía un coche de 80.000 €.
  • Perseguir el fraude fiscal. Según los propios inspectores de hacienda, ha habido dejadez y se han dejado de recaudar 85.000 millones de €.
  • Impedir agresiones imperialistas como las recientes de Iraq, Afganistán, Haití o la invasión de El Líbano por tropas sionistas. La ONU debe servir para algo.
  • Respetar los derechos de los pueblos indígenas, cosa que no hacen gigantes petroquímicos y energéticos en países en vías de desarrollo.
  • Liquidar el sistema capitalista y sustituir el BM, el FMI y la OMC por organizaciones de cooperación que garanticen la alimentación de todas las personas. Otros derechos a garantizar son la asistencia sanitaria universal, acceso a la vivienda, a la educación y un mínimo de calidad de vida. Conviene recordar que cuando unos especulan en el mercado de futuros de la bolsa de Chicago para que suba el arroz, en la India hay personas que mueren de hambre. Esos asesinatos de esmoquin deben ser perseguidos.
  • Acabar con la sobreexplotación de los recursos del planeta. Hay grandes empresas que se saltan esto a la torera y deben ser intervenidas. Si la consecuencia es un crecimiento económico 0, pues que así sea ya que de otro modo nos quedaremos sin recursos.
En segundo lugar, no podemos caer en las trampas del sistema. Nos intoxicarán con los medios de comunicación y persuasión a sueldo de las grandes fortunas, señalando falsos culpables: inmigrantes y funcionarios parecen ser sus víctimas favoritas. Que no te confundan, los culpables son los bancos, los especuladores y los gobiernos cómplices. También los mass media tienen su parte de responsabilidad por haber difundido fervorosamente las miserias del sistema neoliberal y sobre todo por difamar a quienes no estábamos de acuerdo. Claro, que son "la voz de su amo" y cumplen órdenes sin plantearse si son éticas o no.

En tercer lugar, luchar por aumentar el Estado del Bienestar. Costó muchos años, sangre, sudor y lágrimas tener este sistema de protección. Hay que profundizar en él de la siguiente manera:
  • Reducir la jornada laboral a 30 horas/semana máximo manteniendo los salarios. Las máquinas pueden trabajar por nosotros y tendríamos más tiempo libre y más tiempo para estar con nuestros familiares y amigos. Ganaríamos en calidad de vida.
  • Aumentar progresivamente el período vacacional hasta llegar a los dos meses.
  • Aumentar los salarios más bajos, incrementar progresivamente el SMI y las pensiones mínimas hasta los 1000 €.
  • Aumentar los servicios y prestaciones sociales. La Ley de Dependencia puede y debe ser desarrollada en plenitud.
  • Aumentar progresivamente la edad de jubilación para algunas profesiones. Creo que con el estándar de vida que tenemos, podríamos jubilarnos a los 70. Sí, ya sé que esto no es popular, pero es sólo mi opinión.
  • ¿Qué pinta el Rey? ¿Por qué esa familia tiene más derechos que los demás? Lo racional, lógico y justo es un sistema republicano en el que todos tengamos los mismos derechos y deberes. Y un gasto de más de 8 millones de euros al año, de los cuales el monarca no da cuenta, es un gastazo.
Creo que me he dejado bastantes ideas en el teclado, pero para ir abriendo boca lo aquí expuesto puede valer. Lo que está claro es que las recetas neoliberales no valen, han fracasado estrepitosamente. Las propuestas de aquí tienen a reducir la diferencias entre ricos y pobres, a conseguir mayor prosperidad para los que menos tienen y tienden al ideal de justicia social.

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